El mundo de la medicina está lleno de retos dispuestos a batirse día tras día. Los diferentes equipos de investigación trabajan duro con el fin de sacar adelante todo tipo de medicación tratamientos y técnicas con las que pueden luchar de manera eficiente contra todo tipo de enfermedades, desde las más fáciles de curar hasta las más difíciles. Sin embargo, es un hecho de que hay situaciones en las que son necesarias ciertas prácticas como son los trasplantes para garantizar la vida de las personas y puede que los en otras plantas sean el futuro.
Y es que han sido varios los intentos en los que sea colocado el órgano de un animal en el cuerpo de un ser humano, aunque este último caso que te vamos a presentar parece ser la excepción que confirma la regla que actualmente los posiciona en un sitio que dista mucho de ser un remedio.
Un nuevo xenotrasplante tiene éxito
En alguna ocasión te hemos hablado de Muhammad Mohiuddin, un cirujano pakistaní que es considerado el pionero de los xenotrasplantes. Para que no sepa que es esta palabra a día de hoy es la utilización de órganos animales para sustituirlos en aquellos órganos que fallan en un cuerpo humano. Puede que al leer esto estás pensando que hay muchas complicaciones en esta práctica y tienes toda la razón, aunque cada vez se están dando más pasos hacia adelante para evitarlas lo máximo posible.
Como te decíamos antes, han sido muchos los casos que no han sido capaces de resolver problemas o enfermedades que padece un ser humano, dando lugar a la muerte de estos a los pocos meses. Por supuesto, estamos hablando de casos extremos, siendo él si no trasplante una medida para intentar prolongar la vida del paciente. Y esto último es lo que parece que ha conseguido la última operación que cuenta Nature en la que se ha realizado en China en un paciente de 71 años que tenía un gran tumor en el lóbulo derecho del hígado.
Como te puedes imaginar, las previsiones de semejante diagnóstico no son nada buenas. De hecho, el temor de los médicos era que el propio tumor creciera más de lo debido y truncar a la vida del paciente, por lo que se tomó la decisión de hacer esta prueba después de que los comités de ética y trasplantes alegar a motivos de compasión para dar luz verde a la operación.
10 modificaciones genéticas para tener un hígado sano
Después de ocho horas en quirófano, el paciente salió con su nuevo hígado. Sin embargo, es importante tener en cuenta que para la realización de este procedimiento fueron necesarias una serie de modificaciones genéticas previas para conseguir que esa nueva parte del hígado funcionara correctamente como la de un ser humano. Entre ellas se redujo la tasa de rechazo del trasplante algo que es muy habitual incluso dentro de los propios seres humanos a lo que también se suma el uso de varias proteínas que simulan a las humanas gracias a siete nuevos genes y otros tres que mejoraban la producción de azúcar y evitan que el sistema inmune humano la rechazase.
Otro de los grandes retos tiene que ver con el citomegalovirus porcino, el cual produce una enfermedad solamente en estos animales y que podría contagiar a su receptor. Por suerte, para el paciente que fue operado el pasado diecisiete de mayo todo parece ir bien, aunque tendremos que esperar más tiempo para comprobar si el cuerpo efectivamente ha aceptado esa nueva parte extraída de un animal.
