El mundo tecnológico gana mas y más terreno en las vidas de todos los usuarios a cada día que pasa. Lo hemos vivido año tras año con la llegada de los diferentes aparatos electrónicos que podemos llevar incluso en nuestro bolsillo. La inteligencia artificial es lo que se está imponiendo ahora hasta tal punto que la de Amazon es capaz de interpretar las emociones con el reconocimiento facial de las personas.
La compañía utilizará su servicio con las cámaras de seguridad situadas en las estaciones de tren de Inglaterra con el fin de perfeccionar su sistema y dotarlo de nuevas funciones más allá del sistema de detección que permite prevenir robos.
Un nuevo sistema de Amazon
Amazon es una de las empresas de tecnología más puntera del mundo. Para muchos es el sitio donde puedes comprar todo tipo de artículos en línea y te llega a casa en poco tiempo, eso si no has cancelado tu cuenta de Prime, pero detrás de las estanterías digitales y de su asistente virtual Alexa nos encontramos con una firma de las más potentes del segmento. Sin embargo, también ha hecho sus avances en la inteligencia artificial, especialmente en el reconocimiento de imágenes donde ya hace aportaciones de lo más interesantes.
En algunas estaciones de tren de Reino Unido lleva trabajando mucho tiempo, hasta el punto de ser el programa que estudia los rostros de los usuarios, algo con lo que se pueden sacar mucha información como la edad o el género, pero puede que pronto tengan una habilidad extra que pocos se imaginaban. Hablamos del reconocimiento de emociones, algo en lo que la compañía ya está trabajando.
De esta manera, el programa es capaz de analizar las emociones de las personas al menos en tres estados: feliz, triste o malhumorado. El problema es que esta tecnología está en un estado muy precoz y no es posible utilizar de manera eficiente en estos momentos. Por este motivo, no está funcionando a pleno rendimiento, pero hay motivos por los que los usuarios desconfíen de este servicio.
Para qué se utilizará esta tecnología
Precisamente estos lo que llaman la atención de los usuarios, ya que la compañía tiene previsto utilizar todos los datos recabados para mejorar su servicio de publicidad en las rayas de las estaciones donde se instalen. Y es que no solamente conocer los datos demográficos de sexo y edad son suficientes, ya que con el uso de los estados de ánimo puede variar entre utilizar unos anuncios u otros.
Precisamente aquí entra en juego otro elemento adicional más que es la privacidad de los propios usuarios ya que las cámaras son capaces de reconocer a cualquier persona y variar el contenido en función de cuantas haya en una estación o cuáles son los posibles anuncios de interés según cada persona. Veremos si en el futuro esta característica se instaura de manera oficial o si se queda en un mero experimento.
